Fiesta Presentación del Aupa Lumbreiras 2013
Parece que por fin Marcos Rubio ha encontrado en esta localidad Alicantina un emplazamiento estable para los dos festivales con los que, de un tiempo a esta parte, ha ido vagando por diferentes ciudades del levante español: el Aupa Lumbreiras y el Leyendas del Rock. Esta vez el acontecimiento que volvía a acoger la plaza de toros cubierta de Villena (un lugar verdaderamente cojonudo para dar conciertos) era la ya clásica fiesta de presentación Aupa Lumbreiras; algo así como un adelanto de alguno de los grupos que en teoría formarán parte del cartel del Aupa Lumbreiras propiamente dicho y que en la práctica viene a ser el equivalente a una jornada completa del festival pero en un emplazamiento a prueba de adversidades climatológicas.
Sobre las 12 de la mañana salió desde Torre Pacheco L´Armitabus, autobús que organiza la asociación roldanense L´Armitarock (responsable del festival homónimo, este año benéfico y totalmente recomendable) para acudir a la fiesta, y en el que el ambiente festivalero se desató nada más arrancar. Así, entre litros de cerveza, un sorteo promovido por la organización y cánticos y coreos de “la abuela chunga” (canción de un grupo local llamado Dos Ciruelos Descomunales, que participará en el festival antes citado) llegamos a Villena, que aquel sábado 2 de Febrero se convirtió en la capital del rock combativo patrio.
El grupo encargado de abrir la fiesta fue Sin Propina, nombre que aunque de primeras pudiese resultar el más discreto y desconocido del cartel no es sino el nuevo proyecto de Aris, el antiguo líder de los valencianos Transfer. Pasadas las dos del mediodía se subieron al escenario y ofrecieron un repertorio sustentado en los nuevos temas que ya se pueden disfrutar gratuitamente vía internet, y entre los que se encontraban “Mentiras”, “Adiestrados”, “Esa Democracia”, “Todo Por Nada” y “No supe”.
Les sucedieron los alicantinos Fuckop Family, formación sin prejuicios musicales que mezcla estilos como el rap, punk, metal, hardcore e incluso reggae y que venía con su nuevo disco “Spain no brain” bajo el brazo. Pese a lo temprano de la hora se hicieron con el público (que por aquel entonces ya ocupaba todo el ruedo de la plaza) gracias a su buen hacer y a la intensidad de los temas. En los tres cuartos de hora que duró su concierto entremezclaron canciones de su último álbum como “Exotic Combination” con temas más antiguos como “La cultura del odio”, “Levante Corruption”, “Hijo de puta peligroso” o la embrutecida versión del “Guns of Brixton” de The Clash, “Armas de Barrio”. Tras los Fuckop le llegó el turno a los ya veteranos Benito Kamelas, formación emblemática del rock más ortodoxo de nuestro país. Poco menos de una hora duró su concierto, pero fue suficiente para que desplegaran temas tan coreados como “Fue mi abuelo”, “He decidido”, “Loko”, o “… Y no cambiamos ni un solo minuto”.
Poco antes de las cinco y media se hicieron con el escenario Lendakaris Muertos, uno de los grupos más irreverentes y mesiánicos del punk de los últimos años. Su concierto fue una sucesión frenética de canciones, aún más acelerada si se tiene en cuenta que la mayoría no alcanzan los dos minutos. De esta forma desplegaron un repertorio plagado de grandes temas: “Drogopropulsado”, “El último txakurra”, “Detector de gilipolleces”, “Héroes de la clase obrera”, “Vine, vi y me vendí”, “Gora España” (en la que Aitor lució camiseta de la selección), “Fuimos ikastoleros”, la archiconocida “Oso panda”, “Centro Comercial”, “ETA, deja alguna discoteca”, “Veteranos de la Kale Borroka”… Gran concierto que se vio aderezado con la participación de un espontáneo en paños menores que subió a Aitor a hombros y que resultó ser uno de mis compañeros de viaje y, por supuesto, con la ya clásica zambullida del vocalista entre el público.
Después de Lendakaris le tocó tomar el escenario a Gatillazo, nueva banda de Evaristo y que fue uno de los conciertos que más se llenó. Lejos quedan ya aquellos primeros años de la formación en los que el público acudía para ver si caía algún tema de La Polla; la banda ha conseguido quitarse aquel pesado lastre a base de buenos discos, y aunque el tema que más movió al público fue inevitablemente “Txus”, el resto de las canciones no fue menos celebrado. Entre éstas se encontraron temas de su último disco “Sangre y mierda” como “No Love” o “Esto es vida” y canciones de discos anteriores como “Tortura”, “Relaciones Peligrosas”, “Con Perdón”, “Perjudicados” , “Más chulo que un cortapichas”, “Pijos Powers”, “Vendido”, “ Nº1 en U.S.A”, “África, tu colonia favorita” y “Sseguratas Blindaoss”.
Cerca de las ocho se subieron al escenario Def Con Dos, grupo pionero en la fusión entre rap y metal en nuestro país y que lleva desde principios de los noventa “combatiendo la estupidez humana”. Estrenaban disco este mismo mes, y en su concierto se pudieron escuchar los nuevos temas “España es idiota” (nombre que da título al nuevo disco) y “Cazador de elefantes”; canciones con las que nos pudimos hacer una idea de la tónica general del nuevo disco, que tiene pinta de ser de los más metaleros del grupo. El resto del repertorio lo conformaron canciones habituales del directo del grupo: “Poco Pan”, “El Coche no”, “Los muertos del rock”, “Pégale al ruido”, “Ultramemia”, “A.M.V”, “Hipotécate Tú”, “Humano, demasiado humano”, “Trabajando para dios”, “De Cacería”; además de canciones de aparición menos frecuente como “Ciudadano terrorista” o “Veraneo en Puerto Urraco” y, por supuesto, “Acción Mutante”, “El día de la bestia” y “Armas pal pueblo” (las canciones que los dieron a conocer al aparecer en las conocidas películas de Alex de la Iglesia).
Tras éstos le llegó el turno a El Drogas, que con la misma formación de Txarrena ofreció un repaso de los temas más conocidos de su carrera. En esta nueva etapa en la que ha dejado de lado el bajo para centrarse en la labor de frontman, de traje y haciendo malabares con bastones, El Drogas ha adoptado una imagen de “crooner” que le viene como anillo al dedo; algo así como un Tom Waits punky. Durante los ochenta minutos de los que dispuso ofreció un repertorio en el que se mezclaron temas de Txarrena (“Azulejo Frío”, “Así”, “Todos los gatos”, “Frío”, “Empujo pa´ki”) La Venganza de la Abuela (“Fue 24 de diciembre ¿Y qué?”) y Barricada (“Animal Caliente”, “Balas Blancas”, “Todos Mirando”, “No sé qué hacer contigo”, “Sofokao”, “Víctima”, “En blanco y negro”, “La silla eléctrica”).
Los siguientes fueron Soziedad Alkohólika, grupo que en sus directos acostumbra a desatar un auténtico caos entre el público y por el que no parece pasar el tiempo. No son muy dados a la palabra, lo suyo es la tralla ininterrumpida, y este concierto no fue una excepción. No hubo sorpresas en el repertorio, que fue una sucesión de temas emblemáticos: “Tiempos Oscuros”, “Política del miedo”, “Palomas y buitres”, “En el tejao”, “Estado enfermo”, “Ratas”, “El Beneficio de la duda”, “Piedra contra tijera”, “Peces mutantes”, “No kiero participar”, “Buenos Momentos”… Completado con algún tema de su último disco “Cadenas de Odio” como “Barrio Oscuro” o “Niebla de Guerra” y con el inalterable final de “Mótxalo” y “Nos vimos en Berlín”.
Tras la actuación de S.A. tomaron el relevo los sevillanos Narco, otro de esos grupos en cuyos conciertos se requiere la habilidad de saber esquivar codos y rodillas. Venían a presentar su último proyecto discográfico “Versiones para no dormir”, álbum en el que el grupo rinde homenaje a las bandas que más le han influido, eso sí, llevándose las canciones a su propio terreno. En el concierto se pudieron escuchar algunas de ellas, como “Con esos ojitos/ Escupe la flema” (de los pioneros del hip hop 7 notas 7 colores y La Puta Opepé), “Cerebros destruidos” de Eskorbuto y “Chinga Police”, versión de los alemanes Sodom. El resto fueron temas más conocidos de la banda, como “A tomar por culo el mundo”, “Siempre enmarronao”, “Son ellos”, “La última cena”, “Vizco”, “Dame veneno”, “Sotánico”, “Tu dios de madera”, “Matanza Cofrade”, “Kolikotrón” o su tema estrella “La Puta Policía”.
El último plato de la noche fueron los andaluces O´funk´illo, que con su fusión de funk, rock y metal pusieron el broche final a esta fiesta de presentación. Aunque a estas alturas resulte ya algo evidente que a la banda le hace falta renovar un poco su repertorio, gracias a la sólida base instrumental (en especial el virtuosismo de su bajista Pepe Bao, sin desmerecer en absoluto la guitarra de Rafa Kas) y al carisma de Andreas Lutz, el vocalista, siguen logrando un directo sólido y contundente. Temas como “Nos vamos pal keli”, “Riñones al jerez”, “A jierro”, “En el planeta aseituna”, “A shuparla ya”, “Esso Cuenno”, “Rulando”, “O´funk´illo groove”, “En el campito” o la versión de “Killing in the name of…” de los Rage Against the Machine, hicieron moverse al público a pesar de toda la tralla de los grupos anteriores y pusieron el punto y final a la noche.
Una vez fuera de la plaza, tras despedirme de las caravaqueñas que generosamente compartieron su cargamento de alcohol conmigo y gastar el último euro en una necesaria y revitalizante lata de cerveza, llegó la hora de volver al bus, que como era de esperar, estuvo bastante más silencioso en el viaje de vuelta.
Crónica por: Daniel Sánchez Parra
Fotografías: Flickr de Antonio Garrido
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