Ambición, soberbia, sangre, crimen, glamour y cuchillos jamoneros es todo lo que tiene esta adaptación de Juan Cavestany de uno de los clásicos del Bardo, junto a buenas actuaciones y un espíritu innovador con acento gallego.
La acción de este Macbeth, dirigido por el actor y dramaturgo Andrés Lima, quien ya ha trabajado en numerosas ocasiones con Cavestany, se sitúa en una Galicia contemporánea, y atemporal a la vez, como si del antiguo reinado de Escocia se tratara. Ahí es donde Mácbez tiene un puesto decente como Director General de la Xunta Galega, y un día saldrá a celebrar su ascenso como Consejero junto a su compañero Banquo.
Entre copas y copas en un club nocturno de mal agüero, tres meigas con apariencia de prostitutas revelarán a estos dos una profecía: Macbez será además de Consejero, Vicepresidente de la Xunta después Presidente. Pero la predicción no termina ahí, las perturbadoras meigas dicen que el hijo de Banquo será quien finalmente herede la presidencia.
«Esa engañosa palabra mañá, mañá, mañá, nos va llevando por días al sepulcro, y la falaz lumbre del ayer ilumina al necio hasta que cae en la fosa»
Carmen Machi da vida a una moderna Lady Mácbez que recibe en su smartphone la agradable noticia de que su marido quien acaba de ascender de puesto en el trabajo acabará ocupando el cargo más alto de la Xunta de Galicia. Un hecho, que más que agradar, comienza a perturbarla cuando se entera de que el propio Presidente tiene que pasar la noche en su casa, que no castillo, para pasar la noche… Entonces, acabará vendiendo su alma al diablo. Ella fría y calculadora, convencerá a su marido de cometer el primero de un largo historial de crímenes para hacer que la perversa profecía de las meigas se cumpla.
Cavestany ha modernizado una de las tragedias más sangrientas de Shakespeare sin quitarle ni un ápice de la violencia ni sangre que la caracteriza. Le ha dado un toque ibérico, muy del norte, y ha sustituido las espadas por cuchillos jamoneros. Además ha convertido a Carmen Machi y a Javier Gutiérrez, dos actores galardonados numerosas ocasiones y muy recurridos sobres las tablas, en una especie de Bonnie & Clyde teatral, la pareja del crimen por excelencia.
En esta obra solo sobresale la fuerza y compenetración de Machi y Gutiérrez sobre el escenario, habría que mencionar también a Rebeca Montero, Chema Aveda, Jesús Barranco, Rulo Pardo y Laura Galán, que son el resto del reparto, que pueden presumir también de una fructuosa carrera teatral y un gran talento de la interpretación, como demuestran en Los Mácbez.
“La vida no es más que una sombra en marcha; un mal actor que se pavonea y se agita una hora en el escenario y después no vuelve a saberse de él: es un cuento contado por un idiota, lleno de ruido y de furia, que no significa nada”, Macbeth
La escenografía y los efectos de sonido son otra cosa que llama la atención: un cubo gris que hará de la humilde morada, tres sillas trasparentes en el fondo, y fuera de la caja, un juego de focos rodea lo que queda del escenario que rematará con aire cinematográfico la atmósfera este thriller teatral.
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