Los festivales de música suelen asociarse con la primavera/verano, la cervecita fresca, la playita, el sol y todo lo típico de la estación más estival; pero una cosa es cierta: no sólo se puede disfrutar de buenos festivales en ésa época del año.
Y para muestra, un botón (o bueno, tres): este otoño hemos podido disfrutar de tres apuestas festivaleras para acompañar con castañas: el BIME (en Bilbao); el MAD Live (en Madrid) y el festival que nos ataña hoy, el Primavera Club de Barcelona.
Tradición recuperada este año por los creadores del Primavera Sound; el Primavera Club ha reunido a un total de 44 bandas emergentes en la ciudad condal para, a modo de coolhunters musicales, acercarnos a algunos de los grupos que más nos harán hablar (y bailar) en los próximos meses. Tres días cargados de buen ambiente y mejor sonido repartidos por 5 salas emblemáticas de la ciudad: La Sala Apolo y La [2], El Teatre Principal, el Teatre Latino y Sidecar Club.
De entre todos los que vi, éstos son los que más gustaron a la humilde redactora que os escribe estas líneas:
Empiezo por donde acabó prácticamente el festival, pero por un buen motivo: a los canadienses les tenía ganas desde hace meses, y la espera fue larga, pero mereció la pena. Larga, porque comenzaron con retraso (venían de tocar en Francia, habían pillado un atasco de la ostia y llegaron apenas una hora antes de tocar) y tuvieron problemas con el bajo; pero presentando muy dignamente su “More Than Any Other Day”, disco debut lanzado este mismo año.
He de decir que, a juzgar por este disco y su EP «New Calm», me los imaginaba más ruidosos y desorganizados en directo, pero la verdad es que me sorprendió la plucritud y elegancia de sonido que demostraron durante toda su actuación. Una apuesta segura y ganadora que los organizadores del Primavera Club sabían que gustaría.
Si hay algo a lo que le he cogido el gustillo últimamente, es a escuchar bandas compuestas sólo o casi íntegramente por mujeres, como Savages, September Girls, PINS o quienes nos ocupan, las punkarras garageras The Coathangers.
Música hecha por chicas polivalentes (lo mismo te toca una la guitarra y la otra la batería para luego, en la siguiente canción, intercambiar puestos) y cargada de energía y ruido ochentero, estas americanas vienen pisando muy fuerte, y así lo demuestra su último trabajo que vinieron a presentarnos, «Suck my shirt». Mucha guitarra, mucha batería y unas voces que más de un grupo «cañero» querría tener. Sin duda, una de las grandes sorpresas que me ofreció el festival.
Hay que reconocerlo: los 90 están de rabiosa actualidad, y para una «90’s teen» como yo, el triunfo de una auténtica Riot Grrrl actual como Mish Way, la cual desprende esencia de aquel maravilloso movimiento feminista, es todo un gozo. Con una deslumbrante melena rubia platina y una fuerza imparable, cual Courtney Love de los primeros Hole se tratara, ella y sus White Lung llenaron de punk la Latina; y el público les respondió como merecían: con una gran ovación. Al igual que The Coathangers, me gustó mucho ver a nuevas bandas (o, al menos, bandas desconocidas en nuestro país) capitaneadas por mujeres que no tienen miedo de zambullirse en un sonido potente y muchas veces considerado propiamente masculino. Muy recomendables.
The Saurs son, sin duda, una de mis bandas favoritas del panorama musical nacional en la actualidad. Tres jovenzuelos del extrarradio barcelonés que hacen ruido del bueno, y más en directo. Con un sonido que va del punk al rock más bailongo, The saurs son un claro ejemplo del «yo me lo guiso, yo me lo como» que abunda en nuestro país; y la verdad es que el último plato que nos han cocinado, «Dry Finger», está muy rico.
Una banda que gana más y más cada vez que los veo en directo, de quienes no me canso y a los cuales sólo puedo decir siempre lo mismo, entre aplausos: ¡Muy bien, The Saurs!
Hay algo indiscutible, y es que los ingleses tienen una elegancia innata muy interesante. Elegancia. Ésa es la palabra con la cual podría definir el sonido de Woman’s Hour, una mezcla de pop indie y electrónica que a ratos recuerda a The XX, pero con una voz más potente y limpia, de la mano de su vocalista Fiona Jane. Si os gustan los sonidos pulcros y bien acabados, esta banda británica os encantará no sólo por su música, sino también por su cuidada puesta en escena. Una delicia para los oídos.
Cuando me acerqué a escuchar a Muñeco, no sabía a qué estaba a punto de enfrentarme. No había escuchado absolutamente nada antes de ese momento, y ni podía imaginarme a qué iban a sonar. Cuando comenzaron, me dije «bueno, suenan bien, pero no me dicen mucho de momento». Al acabar, me preguntaba precisamente por qué tenían que dejar de tocar, ya que estaba totalmente encandilada por su sonido, y deseaba que siguieran tocando sin parar.
Muñeco han sido, sin duda, mi gran descubrimiento del Primavera Club. La banda catalana fusiona sonidos de post-rock con la electrónica y con el género krautrock, un gran desconocido todavía a día de hoy y que bandas como esta o los chilenos Föllakzoid están dando a conocer en la actualidad. «Ocurre», el nuevo trabajo de Muñeco, os hipnotizará casi de seguro, tal y como me atrapó a mí. Éso sí, ya os lo advierto: si en disco os gusta, esperad a verlos en directo. Sencillamente espectaculares.
Desde Cerdanyola del Vallés descubríamos a este grupo de garage con toques de sintetizadores en la jornada del domingo; Opatov saltaban al escenario con mucho entusiasmo y haciendo mucho ruido… tanto, ¡que he de reconocer que de primeras me dejaron un poco sorda con el sonido de sus guitarras! Pero pronto me acostumbré a él y pude disfrutar de sus temas, que invitaban a ratos a bailar y a ratos a poguear. Una banda a la que seguiré la pista de cerca, sin duda.
Los amantes del indie pop también tuvieron su regalo, y éste eran los canadienses Alvvays. Un poco melosos y calmados para mi gusto, pero con una pulcritud sonora y corrección a la hora de actuar excelente; la banda vino a presentarnos su trabajo homónimo. Guiños a bandas como aquellos poperos The Cardigans o a los más actuales The Pains of Being Pure at Heart, ideales para conquistar los corazones más indies. Interesantes, sin duda.
Y hasta aquí, mi selección de grupos del Primavera Club. Ya queda menos para saber cuáles volverán a tocar durante el Primavera Sound, en Mayo.
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