Dead Bronco en Murcia: Licores que pegan fuerte

Sábado 1 de Febrero de 2014, zona Atalayas, medianoche. Un servidor con petaca de tequila en mano, en la acera de enfrente rebaños de criaturas que suelen habitar la zona de marcha discotequera por excelencia de la noche murciana se agolpan a la entrada de su local preferido, ellos a la espera de echar el polvo de su vida, ellas buscando un tipo que sea capaz de mantener una conversación fluida más allá del grupo muscular que entrena en el gimnasio y de su equipo de fútbol.

Cruces de miradas, afiladas como cuchillos se dejan caer, me abstraigo cuestionando la relatividad del espacio-tiempo y pienso, ¿pero qué coño hago aquí? De repente, un grupo de motos Harley-Davidson aparecen entre la bruma rompiendo la tensa calma, tras ellas se deja ver una furgoneta con dos letras, DB, que me hacen recordar el motivo que me había llevado hasta Atalayas esa noche.

DB, iniciales de Dead Bronco, una banda getxotarra formada por Paco Sánchez como vocalista y a la guitarra, Alain Llopart al banjo y guitarra, Oscar Calleja al contrabajo, Jokin Corral a la batería y Jokin Totorica a la lap steel guitar actuaban por primera vez en la capital, por lo que había una gran expectación por escucharlos en directo. El local preparado para la ocasión especial, fue la sala Rock House, que además ofrecía la posibilidad de comprar un pack que incluía entrada al concierto y cena en el restaurante, por lo que mucha gente aprovechó esta original iniciativa.

Pasaban unos minutos de la medianoche, la sala a rebosar de gente de todas las edades, la asociación cultural Motor Kulture que también organizaba el evento estaba presente al completo y la vieja escuela de rockabillies se mezclaba con las hornadas más jóvenes en el mismo lugar, deseosos de escuchar auténtico sonido Bronco. El concierto comenzó con el tema “Drinking song”, brindando con Paco y los suyos por esta noche que tanto se llevaba esperando en Murcia. Canciones como “Lonesome bedtime blues”, que está a medio camino entre el blues y el rockabilly,  y “In hell”, que da nombre al disco, fueron las culpables, junto a la decoración de la sala, de que el ambiente se pareciera a un auténtico saloon de la norteamérica profunda.

Más tarde fue el turno de los temas “Hard liquor goes down quicker” y “Constant sorrow”  hasta llegar a uno de sus grandas canciones del disco, “Take my home”, donde se muestran las influencias más country y de la música de raíces norteamericana. Dead Bronco rindieron su particular homenaje al gran Hank Williams Sr con “Lonesome Blues” e interpretaron el tema “Straight to hell” de Hank Williams III, nieto del mítico cantante de country.

Los inmortales Johnny Cash y Elvis Presley también tuvieron su tributo en el concierto, con una genial versión de “That ´s all right” y “Cocaine blues”, que seguro que arrancó una sonrisa de felicidad al bueno de Johnny allá donde esté.

Para el cierre del concierto había otra versión de un clásico, “Folsom prison blues” de Cash, que originó los últimos pasos de baile de todos los asistentes al concierto, personas de 60 años plantaban cara sobre las tablas a los más jóvenes del lugar e incluso, un sostén voló desde el público directamente a la cabeza de Paco, que acabó rodando por los suelos, llevado por la emoción y entrega demostrada por el público murciano.

Tras el concierto, tuve la oportunidad de intercambiar algunas palabras con los miembros del grupo, que se encargaron ellos mismos de la venta del merchandasing. Para este verano tienen planeada una gira por Europa y ya andan trabajando en su segundo disco de estudio. Sin duda, Dead Bronco son un grupo prometedor, un quinteto que se deja la vida en el escenario en cada concierto y fue catalogado por la BBC como grupo revelación, además de finalista del BBC Music video festival y del Cinemad.