Probablemente una de mis citas favoritas. ¡Y qué razón tenía Ortega y Gasset! Esta frase acabó con todos mis miedos y complejos, los que solían acecharme y amenazan con volver de vez en cuando. Pero cuando por fin logré entender el significado de esta frase (o al menos el que tiene para mi) hubo un punto de inflexión en todo lo que creía y pensaba sobre mi misma y el mundo que me rodeaba.
“Yo soy yo y mi circunstancia” significa que no hay ni habrá nadie como tú o como yo en este mundo. Nadie que tenga ese lunar tan molesto en la espalda, que se ría hasta llorar con comedias estúpidas o sienta ese cosquilleo en el estómago al escuchar la melodía inicial a piano en la canción “lo ves” de Alejandro Sanz.
“Yo soy yo y mi circunstancia” trata de explicarte que no importa si no eres tan alto, delgado o talentoso como la persona que se sienta a tu lado. Que no eres menos ni más que nadie, que eres tú y con eso tienes más que suficiente.
“Yo soy yo y mi circunstancia” no es una simple frase, es una declaración de intenciones. Quiere decir que descubras lo que te hace feliz y lo hagas, que no necesitas dar explicaciones y que no tienes por qué justificarte. Que no te importe lo que piensen los demás.
Qué fácil parece cambiar una vida, un concepto o un pensamiento con seis simples palabras. Qué simple conseguir una utopía en la que nadie dude de sí mismo,de quien es, quien quiere llegar a ser o que quiere hacer. Incluso a quien quiere. Pero yo no hablo de eso.
Hablo de dejar que esas dudas te asalten, de interiorizarlas, aceptarlas y conseguir saltar el mayor obstáculo que tenemos SIEMPRE: nosotros mismos.
Y así fue como me di cuenta:
Me di cuenta de que me gusta la gente clara, la cerveza con espuma y el café con leche y a deshoras. El epílogo de un libro. Las noches de desenfreno con los amigos que acaban cerrando un bar. Me parece que “Million dollar baby” es la mejor película de Clint Eastwood. Los retos, las miradas cómplices y los abrazos que ahogan los sentimientos encontrados. Pero por encima de todo me gusta aceptarme como soy. Sin disculparme. Sin remordimientos. Yo. Pero esa sólo soy “yo y mi circunstancia”.
1 Comment
Te entiendo porque algunas frases son la llave que abre nuestros razonamientos y destapa algunas de las grandes dudas que habitan en nuestro ser.