Sin H & Jaro Desperdizio: lobos esteparios entonando el blues de los ahogados

Sin H y Jaro Desperdizio, con Jim Morrisound a los controles, presentaron por primera vez en directo su reciente El Blues de los Ahogados. Esta primera referencia conjunta nació en Sala 12&Medio y prácticamente ante toda la escena rapera de Murcia y alrededores. También respondió al aullido el público, que pese a las fechas asistió en manada al alumbramiento y a punto estuvo de llenar el aforo.

Tras la nostalgia y el frío que los unió, El Blues de los Ahogados representa una relidad aún más cruda. Referencias a Hemingway y Bukowski, alcohol y lagrimas en los versos. El disco es para escucharlo con los ojos cerrados y el corazón frío. Todo lo contrario que el directo. Durante todo el bolo, Sin H y Jaro llevan muy arriba al público, lo animan pese a sus versos tristes y difunden la fiesta con cada estribillo. Nadie ha venido a pasarlo mal, los problemas ya están ahogados y el directo es una verbena para las cervicales.

Lobos esteparios. Como en la obra de Hermann Hesse, Sin H y Jaro Desperdizio representan la división del humano. Su parte más personal y vulnerable, y la animal, desarraigada, agresiva y huraña. Sus letras, como salidas de la estepa, son llanas, extensas, intensas. Cazan al público con rimas directas llenas de visceralidad. Sin H de una forma más suave, estructurada y desgarradora, Jaro con un punto más agresivo, violento, incontrolable.

Y ambos, en vez de matarse entre sí, renacen unidos como hijos del agobio. Agobio que liberan y, al menos aparentemene, superan tema a tema. Intercalan canciones de personal a ratos, dando un respiro a El blues de los Ahogados, pero no a la crudeza que recorre el ambiente. Y todo, sin que en ningún momento deje de ser una fiesta de rap por la presentación del primer disco profesional del nuevo dúo de moda en Murcia. Se han movido con Piezas, con Foyone y por su cuenta, y allá donde han actuado se han encontrado público. Están creando manada.

Eso sí, antes de salir de Murcia, reunieron a la manada local con la que siempre se les puede ver. Alex Orellana, J Higgz, Pelukas y Jayder por un lado, y una buena representación de ‘El Club de la Lucha’ por otra. Los del Club ya nos tienen acostumbrados a un directo cargado de energía, con el escenario repleto. En esta ocasión especialmente llamativo estuvo Bravo, con unas barras directas, rimas poco obvias y un toque vacilón que gustó al público. Después, Alex Orellana y J Higgz repartieron temas de todos los palos acoplados perfectamente a este formato en el que ambos comparten tarima y se apoyan.

Al final, ambas manadas reunidas quedaron ahogadas en whisky, humo y la melancolía de los hijos del agobio.