Las semillas de la Cultura Cannábica que defienden el activismo y la legalización brotan con fuerza por todos los rincones del mundo y se plantan también en la huerta de la Región de Murcia. Nuestra comarca ya tiene registradas 61 asociaciones vinculadas al uso del cannabis: 26 en Murcia, 13 en Cartagena, 5 en Alcantarilla, 4 en Molina de Segura y las demás repartidas por el resto de municipios. La más antigua nació en Alcantarilla en el 2003, sin embargo, no es hasta 2015 cuando se aprecia un notable crecimiento. Hasta 29 asociaciones se sumaron a esta verde revolución ese mismo año.
¿Qué son las asociaciones cannábicas? ¿Son legales?
Una de las preguntas más habituales que surgen con respecto a los Clubs Sociales Cannábicos (CSC) es que, si la venta de marihuana es ilegal, por qué este tipo de asociaciones no lo son. Más allá de que en España el consumo de cannabis está despenalizado desde 1974, desde el Estudio Jurídico de BROTSANBERT, Esther C. Sánchez, abogada especializada en asuntos contra la salud pública (drogas), explica que los clubs cannábicos existen gracias a dos garantías constitucionales: «el derecho a la intimidad y libertad personal y, el derecho a la libre asociación». El derecho de los españoles a hacer lo que quieran en privado (siempre y cuando no afecte a terceros), incluso consumir marihuana y, el derecho a reunirse si los particulares desean agruparse para cultivar y/o consumir una cantidad personal de cannabis en un espacio privado, son dos derechos constitucionales que amparan la legalidad de los CSC.
Bartolomé De Haro Cabanas, director de la Federación de Asociaciones Cannábicas del Sureste (FAC SURESTE), defiende la importancia de los clubes que siguen el Código de Buenas Prácticas y, que abogan por una regulación responsable del cannabis tanto para uso recreativo como medicinal. Son asociaciones sin ánimo de lucro, que se autoabastecen y dispensan cannabis entre sus asociados, todos ellos mayores de edad, declarados consumidores y, que se reúnen en un ámbito privado para consumir esta sustancia.
Por un lado, estas asociaciones velan por los derechos de los consumidores del cannabis permitiéndoles acceder a una sustancia de calidad sin tener que recurrir al mercado negro; informándoles sobre las medidas de reducción de riesgos y daños, y, ofreciéndoles servicios médicos, psicológicos o terapéuticos especializados, como es el caso de la asociación Salvados en la región que, con la colaboración de diferentes doctores, aplica tratamientos con cannabis medicinal a sus diferentes usuarios terapéuticos.
También realizan todo tipo de actividades que los socios demanden, relacionadas o no con el cannabis, desde talleres de pintura o actuaciones de micro libre hasta charlas sobre cultivo de cannabis ecológico y la planificación de viajes y/o contratación de autobuses para acudir a diferentes eventos sobre activismo cannábico en España, como la décima Marcha Mundial de la Marihuana el próximo 5 de mayo en Madrid.
Y, por otro lado, la actividad de estas asociaciones no solo busca la satisfacción de sus socios, sino que, además, promueve la reducción del consumo de cannabis en la vía pública protegiendo y mejorando la salud la toda la población.
En términos generales, si la actividad se basa en un autoabastecimiento para el consumo exclusivo de los socios y, la asociación no trasgrede la línea de su actuación, no debe haber problemas ni tienen porque haber líos.
Cáñamo, mucho más que marihuana
Dentro de las aplicaciones milagrosas de esta planta, encontramos el cultivo del cáñamo, una variedad de cannabis que produce fibras, semillas, aceites, tinturas, medicamentos… y que no posee efecto psicoactivo. España y la Unión Europea se permiten la producción de cáñamo industrial cuando el contenido en tetrahidrocannabinol (THC) se encuentre por debajo del 0,2% desde el 12 de noviembre de 1999.
Se sabe que el cultivo de cáñamo industrial podría contribuir a la consolidación de una economía verde más que rentable. Las aplicaciones del cáñamo industrial son muy numerosas, desde productos de cáñamo con cannabidiol (CBD) hasta la producción de fibras naturales muy resistentes. Además, su uso encaja a la perfección con los nuevos hábitos de vida que promueven dietas más saludables y, una mayor concienciación con el medio ambiente. No te será difícil encontrar productos del cáñamo en herbolarios o tiendas ecológicas de la ciudad, desde preparados para pastas hasta postres, pasando por masas de pizza o condimentos.
La Región de Murcia también tiene cultivos de este tipo, la empresa cañamera Hempatiza, con sede en Murcia y marca registrada, posee su propia plantación de cáñamo y, principalmente, dirige su producción hacia el mercado de la alimentación y la cosmética. Ofrecen productos como semillas y harina de cáñamo, alimentos saludables, ricos en proteínas, omega 3 y 6; además de productos cosméticos como cremas hidratantes faciales y aceites elaborados con el principio activo de la semilla del cáñamo que posee un elevado potencial hidratante y terapéutico. El año pasado, por ejemplo, Caravaca de la Cruz presentaba su explotación de cáñamo industrial destinada al sector de la alimentación, la cosmética y el calzado, este último tradicional en el municipio.
Una cultura por descubrir
En Murcia la Cultura Cannábica posee una gran historia y, en la actualidad, se encuentra más activa que nunca. Desde ahora intentaremos despejar cualquier duda relacionada con esta inmensa cultura aún por descubrir para tantos murcianos, eliminar tabús y desestigmatizar todo lo que rodea a esta planta que nos ha acompañado desde la prehistoria. La planta Cannabis Sativa tiene múltiples usos, por lo que daremos a conocer las diferentes propuestas, eventos e informaciones que creamos que puedan ser de interés para todos vosotros, seáis consumidores o no. Abordando desde su situación legal hasta sus aplicaciones y estudios, pasando por asociaciones y empresas vinculadas a esta sustancia.
Estas publicaciones no pretenden convertirse en una especie de ‘apología a las drogas’, únicamente ofrecen información real, veraz y cercana sobre la Cultura Cannábica de Murcia. La única forma de generar un debate serio sobre activismo y legalización se consigue mediante la información, contrarrestando todo tipo de descripciones: desde efectos celestiales inmediatos hasta efectos dañinos a largo plazo, pasando por la actividad de asociaciones y empresas vinculadas a esta sustancia, como los grow shops y, por las múltiples aplicaciones a otras industrias como la textil, la alimentaria y la farmacéutica.
3 Comments
Buen artículo 👏👏 me ha parecido muy interesante y fácil de leer.
Es un gran artículo y otro pequeño paso hacia un cambio real de políticas y concienciacion gracias por el artículo y a seguir así de bien huerteros, paz amor y buenos humos
Es muy interesante . Yo tengo decidido de iniciarme como agricultura moderna
En cuanto disponga de economía para poder plantar , quisiera visitarles
Gracias por su artículo y apoyo