Más de 25.000 personas se reunieron en el Estadio Enrique Roca para recibir a Iron Maiden a su paso por Murcia. Para muchos una noche inolvidable, para la ciudad una noche que debería marcar el camino a seguir.
Desde el momento en el que se conoció que Murcia era una de las ciudades elegidas por Iron Maiden para su nueva gira, teníamos claro que había que marcar esa fecha en el calendario.
Iron Maiden no falló, ni siquiera apostando por su último disco y sus nuevas canciones perdió la atención de un público que ya estaba entregado incluso antes de llegar al concierto. El tranvía, repleto de camisetas negras del grupo, ya era una fiesta. Cuando sonaron sus grandes éxitos el éxtasis fue inevitable.
Para su público son algo más que un grupo, están por encima de cualquier apelativo, y eso se respiraba a cada momento. Era inevitable preguntarse cuántos de los grupos que seguimos hoy en día podrían llegar a conseguir algo así.
Son casi 50 años sobre los escenarios, van sobrados de actitud y saber hacer. Cuesta creer la edad que tienen al verlos moverse de un lado a otro del escenario. Hemos visto festivales enteros con menos energía que Iron Maiden interpretando cualquiera de sus canciones.
El Estadio Enrique Roca demostró que es capaz de albergar eventos de esta envergadura pero si se quiere situar a Murcia y el estadio en el mapa de las grandes giras debe seguir apostando por ello y perfeccionando sus servicios. Todo salió bien pero podría salir aún mejor y ser más cómodo para el público. Con un evento así cada varios años no es posible.
Allá por 2018, con los show de Operación Triunfo y Luis Miguel, parecía que el Estadio Enrique Roca comenzaba un nuevo camino en lo que a grandes eventos se refiere. Un camino que no pasó de ahí y que se dejó de andar. Ahora, tras el éxito de Iron Maiden, esperamos que sea diferente y que Murcia vea la oportunidad que tiene para situarse como ciudad de referencia en el sureste del país para cualquier gran gira que decida pasar por España.
No Comments