Grupo de Expertos Solynieve es el proyecto en paralelo de Jota (Los Planetas), Manuel Ferrón (compositor de letras de canciones de Los Planetas), Víctor Lapido (091, Lagartija Nick), Antonio Lomas y Miguel López (Lori Meyers). Este viernes 26 de Febrero pasarán por Sala REM en el que será el primer concierto en una sala murciana de esta banda granadina, aprovechando la ocasión hemos hablado un poco con ellos.
Cuando uno comienza un nuevo proyecto teniendo a la espalda nombres como Los Planetas, Lagartija Nick, 091, Lori Meyers… ¿juega más a favor o en contra?
Hay un poco de todo: a favor, que recibes una atención inmediata que por lo general es muy difícil de obtener para cualquier grupo que empieza; en contra, que es muy fácil que el grupo se considere como un proyecto menor y quede a la sombra de los proyectos precedentes de cada miembro del grupo.
Todos los del grupo habéis formado parte con vuestras canciones, de una forma u otra, de la vida de muchas personas, ¿qué siente uno al pensar sobre eso?
Es emocionante pensar que una propuesta tuya puede convertirse en algo importante, para bien o para mal, en la vida de otras personas de un modo que no puedes prever ni controlar. La recepción, la manera en que se recibe una creación propia, es una parte fundamental de cualquier proceso de creación artística pero no es algo en lo que pienses, al menos en mi caso, hasta que compruebas que ha sucedido.
Y ya no solo en la vida personal, también son muchas las nuevas bandas que ven en vuestras canciones un referente, ¿os imaginabais algo así cuando cogisteis una guitarra por primera vez?
Cuando empiezas no piensas en trascender o influir, solo satisfaces unos impulsos básicos, una necesidad de expresarte a través de la música. Tal vez el deseo de hacerlo esté latente desde el principio pero no es fundamental en primera instancia, aunque reconforta si sucede, particularmente cuando sin bandas que te gustan las que se miran en tus canciones y las reivindican.
Siempre se habla de Granada como cuna de lo que ahora llamamos música indie, vosotros lo habéis vivido en primera persona, ¿ha cambiado mucho la situación para un grupo que comienza respecto a los años en los que empezasteis a subiros a un escenario?
Notablemente. La escena granadina simboliza la resistencia contra la persecución manifiesta que sufre la música, particularmente la que se basa en una propuesta solida y no en un mero afán recaudatorio, o en un deseo de notoriedad pública. No obstante, auguro un futuro poblado de bandas granadinas dando guerra y poniéndoselo muy difícil a los censores y los contables.
Decís que Grupo de Expertos Solynieve para vosotros es como una fiesta, ¿eran necesarios nuevos aires tras tantos años?
Era, y sigue siendo, necesaria la celebración del arte y el pensamiento. Modestamente, hemos venido a poner nuestro granito de arena.
«En criticar y murmurar el tiempo que te has llevado…” (Estoy vivo de milagro) ¿qué tal se vive en la música con ese deporte nacional que es el criticar por criticar?
Reza el dicho: a palabras necias, oídos sordos. Nosotros preferimos callar y escuchar a los sabios por si se nos pega algo.
«Fandango de la libertad» es una canción que más de uno deberíamos seguir cada día, ¿sería esta canción una buena forma de definir que es para vosotros el grupo?
Es un argumento recurrente en nuestro discurso la invitación a la rebelión personal que hacemos extensiva a todos los que lean esta entrevista.
En «Año nuevo» habláis de la insostenible situación que vivimos pero con la esperanza de que este mundo se ha acabado y otro nuevo va a empezar. Parece que, poco a poco, se va haciendo realidad, ¿qué crees que hace falta que para la gente termine de abrir los ojos?
Verdades como puños, de las que remueven conciencias y eliminan el miedo.
Este verano os veremos por más de un festival. Últimamente parece que vivimos en una especia de “burbuja festivales” en la que cada año aparecen más y más festivales, ¿creéis que acabará explotando? ¿Es sostenible tantos festivales y, además, del mismo corte?
Las primeras palabras que se escuchan en nuestro primer disco, Alegato meridional, son: «esto tendrá que explotar por alguna parte. Alguien tendrá que largarse, que yo me pienso quedar». Pues eso.
¿Cuál fue el primer festival al que fuisteis como público? ¿Si os tuvierais que quedar con uno solo con cuál sería?
El Zaidín rock, supongo, y el primer Fib. Hay magníficos festivales, bien programados y en los que se trata con cariño y respeto al público. Cualquiera de ellos.
Aún así, un festival nunca tendrá la magia de un concierto en sala ¿no?
Son experiencias diferentes, ambas con cosas positivas. Lo hemos pasado muy bien en festivales aunque, como dices, un concierto en una sala es algo diferente y magnífico.
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