Guillermo Rodríguez, más conocido como Arkano, acaba de publicar su primer disco bajo el título de «Bioluminiscencia», un trabajo en el que afirma que ha querido recoger la luz de todos aquellos seres bioluminiscentes que se han cruzado en su camino a través de 14 canciones. Fue el rapero más joven en ganar la Batalla de Gallos de España, con solo 15 años, y también ha publicado un libro.
Arkano visitará Murcia el próximo mes de Junio ya que será uno de los cabezas de cartel de la quinta edición del festival Animal Sound que se celebra los días 15 y 16 de junio. Hemos hablado con él sobre su disco, su carrera, el rap, machismo, las batallas de gallos…
A excepción de nombres como Rayden o como tú, es difícil ver a raperos promocionarse en medios generalistas, ¿es desinterés por parte de los medios o por parte de los raperos que rehuyen de esos medios?
Siempre ha habido ese toque de autolimitación, y luego también por parte de los medios, que han reforzado esto utilizando el rap únicamente a través de sus estereotipos negativos de toda la vida de violencia, drogas, machismo etcétera, cuando el rap va mucho más allá, tiene una profundidad cultural que hay que destacar y que yo creo que es trabajo de todos, tanto medios como nuestro el hacer que se expanda y se normalice la presencia del rap en los medios generalistas.
En unos días en los que ver el vaso medio vacío es la tendencia, Bioluminiscencia muestra precisamente la otra cara de la moneda. ¿Por qué? ¿Cuánto de férrea convicción y cuánto de personalidad hay en tu forma de ver las cosas así?
La base está en mi personalidad: soy optimista y creo que siempre se puede ir a mejor y tengo esperanza en el cambio. Pero es que realmente así lo percibo. Lo que hay en Bioluminiscencia no es un optimismo vacío, de hecho el optimismo vacío me da mucha rabia. Me pesa mucho la gente que está feliz por ser feliz y es todo como ‘¡ah, la vida es color de rosa!’ y todo este tema. Pero sí que creo que muchos problemas los destaco pero creo que tienen solución y que todo esto puede ir a mejor.
En muchas entrevistas dices que quieres cambiar el mundo, aportar algo positivo: ¿Hasta qué punto crees que puedes hacerlo?
Primero desde la música, el arte y la influencia que esto tiene, ayudando en la medida de lo posible a modificar el imaginario colectivo. Es decir: toda la gente que me escucha puede empezar a creer en un cambio si yo empiezo a contarles que este cambio puede existir. Y luego con acciones concretas. Por ejemplo: el primer concierto de la gira de Bioluminiscencia lo hice en Madrid, en la sala Joy Eslava, la entrada sólo costaba 5 euros y toda la recaudación, el 100%, fue para la ONG ‘Avanza’, que trabaja para ayudar a personas que están faltas de recursos. Combinar estas dos ramas de acción creo que es mi forma de aportar este granito.
Hemos visto estos días un calendario un calendario bajo el nombre de «Ninguna chavala tiene dueño» contra la violencia de género y con un buen número de raperos, ¿crees que el rap puede ser feminista de cara a la galería desde ya o debe primero reflexionar sobre su cuestión interna con el machismo?
Yo creo que ambas cosas pueden ir en paralelo. Obviamente en el rap hay mucho machismo, mucha homofobia…pero esto no quita que se puedan realizar este tipo de acciones para visibilizar que hay rapers que están concienciados con esto. Evidentemente las protagonistas tienen que ser ellas. Ellas son las que tienen que protagonizar este cambio, están jugando un papel histórico y nosotros somos aliados que tenemos que ayudar como podamos y como nos dejen. Entonces, bueno, no veo mal que se hagan este tipo de cosas. Creo que son necesarias, de hecho.
Me sorprendió el verso de ‘Eva’ cuando escuché la acappella en el concierto sobre “hijos sanos del patriarcado”. ¿Has recibido educación feminista, lees sobre el tema, colaboras con algún colectivo o te instruyes a través de amigas o amigos…?
Yo creo que ha sido una evolución muy natural. Soy una persona curiosa y cuando algo me interesa o me llama la atención o empatizo con ello, pues empiezo a investigar y empiezo a conocer. Sí que ha habido una persona que me ha influido muchísimo: mi exnovia. Ella es muy activista y la verdad es que me ha enseñado muchas cosas al respecto.
«Que yo haya podido cambiar me da la esperanza de que el resto de personas puedan hacerlo»
¿Alguna vez ha sido machista Arkano? ¿Cuándo?
Sí, de hecho empiezo mi libro hablando de la primera rima que hice en un escenario y fue una rima machista. Pero yo creo que ese es el mejor ejemplo. Es decir, yo busco un cambio en la sociedad. Pues ver que ese cambio se ha podido dar en mí mismo me da esperanza de que eso pueda suceder en el resto de personas. Obviamente teniendo en cuenta que a mí me queda mucho por crecer.
Ahora que lo mencionas… libro, disco… estás que no paras, ¿de dónde sacas el tiempo?
Buena pregunta. La verdad es que ha sido tiempo de mucho trabajo. Con el libro por ejemplo han sido semanas y semanas encerrándome en la biblioteca, dejando un poco de lado el mundo. De hecho he tenido meses complicados a nivel mental porque me veía bastante saturado. Ahora no. Ahora me veo más…con eventos y cosillas, pero bueno. Disfrutando, más libre.
¿Y cómo has tardado tanto en dar el paso de sacar disco?
A ver, realmente yo empecé en el rap escribiendo temas y he sacado cinco maquetas. En los últimos años sí que es cierto que me centré más en la improvisación, pero lo de escribir siempre ha estado ahí. Entonces pues ha sido un proceso natural. Es algo que tenía que salir y así se dió.
Y, ¿ha significado tanto el record Guinness para tu carrera como parece desde fuera? Porque parece que para el público generalista y ajeno al rap y en términos de medios ha sido un salto enorme entonces, ¿quizás ha sido eso lo que te ha animado al disco y a sacar más proyectos?
No, yo creo que lo habría hecho igual. Llevo haciendo proyectos e iniciativas toda la vida. Unas han salido mal, otras bien, las menos, y realmente el récord fue un punto de inflexión y una oportunidad de dar visibilidad al rap en los medios de una manera más sana, de aparecer y decir: ‘mira, que batallas de gallos no es sólo un chaval cagándose en la madre de otro, que la gente que improvisa tiene sus inquietudes sociales y quiere transmitir cosas’. Y por suerte se hicieron muchísimo eco de ello.
¿Te esperabas una repercusión como esa?
No, que va, que va. Yo iba a hacer el loco, a estar 24 horas contando lo que tenía en la cabeza.
Es que fue una burrada eso, normal que haya tenido tanta repercusión.
Sí (risas). Fue un movidote.
«No estoy de acuerdo con que Chuty perdiese la batalla»
Hablando de improvisación… este año, una vez más, polémica con la final internacional. ¿Cómo te viste tú en tu batalla con Aczino?
Bien. Me ví guay. La verdad es que estuve entrenando, estuve concienciándome para el asunto…pero es que era prácticamente imposible ganarle. Es muy muy bueno Aczino y ya jugando en casa es imbatible.
Osea que estás de acuerdo con el resultado.
Sí.
¿Y la polémica con Chuty?
Ahí no estoy de acuerdo. Ahí creo que Chuty lo hizo mejor. Osea, obviamente no creo que haya tongo. La gente dice: ‘¡Tongo! ¡Conspiración! ¡No querían que Chuty ganara!’, no. Los jueces…yo he sido juez de una Redbull batalla de los gallos y cada uno pues viene de su casa, nadie adoctrina a nadie y puedes votar lo que quieras. Lo que pasa que, lamentablemente, creo que el jurado se equivocó y dio ganador al que no quiera. Todos cometemos errores. Lo que pasa que este es bastante jodido porque Chuty llevaba todo el año preparándose para eso, para mí actualmente es el mejor que hay, y es una pena.
Volviendo a lo de Aczino: Mucha gente opinó en los comentarios sobre la parcialidad del público, algo incontrolable por el tema de estar en México, pero también pedían que las batallas tuvieran lugar en países imparciales…¿lo ves factible?
Mmm…se puede hacer y la verdad es que equilibraría las cosas, pero yo no me centraría en eso. Es como… tú ves un partido de fútbol, el otro día estuve viendo yo el Villarreal-Barça: pues cada vez que el Villarreal hacía algo bueno todo el público le apoyaba y al Barça iban a machacarle, pero el Barça tiene que saber jugar con eso. Entonces, obviamente Aczino lo tuvo más fácil para hacerlo bien pero bueno, es que hay que saber estar ahí y llevar esa presión. No creo que haya que centrarse en eso.
¿Tú crees entonces que no influye en el jurado?
A ver…creo que hay jueces más profesionales que otros. Sí que sé que hay jueces en los que no influye y están realmente escuchando la rima y otros que se dejan sorprender. Pero eso ya depende de la profesionalidad del jurado. Pero en una situación ideal en la que se supone que estamos ante jueces en los que no influyen esas cosas, en lo único que influye entonces eso es en el rendimiento de los participantes. Pero eso es lo que hace un campeón para mí también. El estar fuera y decir: ‘no, me sobrepongo a las circunstancias y lo voy a hacer igual que tú aunque estemos en tu casa’. Cosa que yo no supe hacer.
«Meterme con la gordura de Jony Beltrán me generó debate interno sobre los límites en las batallas»
Igual que a los hombres nos cuesta empatizar con el tema del machismo, a los heterosexuales también nos cuesta empatizar con otras sexualidades con respecto a la homofobia. ¿Cómo de jodido es sufrirla en pleno siglo XXI en España? ¿Siguen habiendo tantos insultos y vejaciones?
Bueno, yo creo que se ve. Las noticias de agresiones homófobas, la cantidad de comentarios que hay en Internet…sólo viendo las batallas, donde está súper normalizado que se utilice maricón como insulto, como si fuera algo negativo, y pareces un loco, un ultrasensible y un conspiranoico si empiezas a decir que no se llame a otro ‘homosexual’ como si fuera algo que degrada al ser humano. Entonces lamentablemente sí. La homofobia sigue presente entre nosotros.
Ahora que mencionas al rap y las batallas: También es cierto que puede que haya muchos chavales que personalmente no ven la homosexualidad como algo negativo, pero como siempre se ha utilizado en las batallas lo ven como un arma muy fácil de usar.
Totalmente. De hecho tengo muchos debates al respecto, debates internos incluso, de dónde está el límite. Y todavía no lo tengo claro. Por ahora, por lo que voy, es que si estás ayudando a normalizar un comportamiento que promueve la discriminación hacia un grupo que ha sido oprimido de manera histórica, ahí mal. Es decir, las madres no han sido oprimidas por el hecho de ser madres. Normalizar el ‘me cago en tu madre’ no va a ser algo que va a ayudar a la opresión de las madres, pero un insulto homófobo sí. Y un insulto machista también. Y luego, por ejemplo, yo en la final internacional me metí con la gordura de Jony Beltrán. Y eso me genera debate porque no sé si lo hice bien. Porque es como: ahí también hay discriminación. Y realmente los gordos han sido discriminados y sufren bullying. Entonces, ¿hasta qué punto esa parte está bien, no está bien…? No tengo una respuesta fija.
Del freestyle, incluso desde otros sectores del rap, siempre ha habido quien cree que no promueve unos valores positivos en los chavales. ¿Tú que opinas al respecto?
Yo creo que sí que promueve valores positivos el freestyle. Tanto a nivel cultural, como de espectáculo como artístico. Y luego ya depende del artista. Igual que puedes encontrar raperos que te hablan mierda y raperos que hacen cosas súper constructivas, igual en el trap, en el freestyle también. En los shows que hago yo de freestyle, o los que hacen grupos como Freenetiks, hay momentos súper emotivos, momentos con contenido social, momentos que yo creo que sí que aportan.
Cómo es tu relación con RedBull ahora mismo, ¿tienes firmado patrocinios, contratos…? Cuenta un poco cómo se mueve eso detrás de las bambalinas para los que no tenemos ni idea.
No, no hay ningún tipo de contrato, simplemente funcionamos por eventos. De repente hay una batalla de gallos y me contratan para ir de juez, o voy de participante y me contratan para ello.
Osea que no tienes nada firmado con ellos con respecto a exclusividad ni similares.
Para nada. Sí que me tienen en cuenta para muchas cosas. De repente es la final de breakdance del BC One, pues me contratan para actuar en el descanso. Pero cositas puntuales.
«Después de dar pasitos hacia fuera el tema del ego en el rap se ve ridículo»
Tú que eres una persona activa en las redes sociales, ¿cómo las ves? ¿Crees que son una gran oportunidad para, por ejemplo, tu propósito de cambiar las cosas, ayudar o crees que ahora mismo están tan llenas de odio y susceptibilidad -en el sentido de que cualquier cosa que digas puede molestar a cualquiera- que mucha gente tiene miedo a usarlas por lo que le pueda pasar?
Es que al final es súper complicado, porque estás súper expuesto a todo. Yo me considero una persona muy libre y muy natural y que lo que le apetece decir lo dice. Pero sí que es cierto que muchas veces me pienso las cosas dos veces antes de publicarlas porque a la mínima ya está. Por ejemplo, hace un tiempo me crucé con un vídeo de un niño que sale llorando porque le han pegado en el colegio y me dio pena y lo compartí. Y al instante me empezaron a llegar tuits del estilo: ‘¿es que no sabes que su madre es nazi? Y que es una familia racista y se meten con él por eso, ¿cómo puedes apoyar eso?’ Y yo estaba en plan: ‘Madre mía’.
Sí, pero que todo vino de que una persona afirmó que eran racistas.
Claro, es que al final la información va fluyendo y al final la persona que te está criticando se ha enterado hace un minuto. Pero él ya lo sabe y es como: ‘¿Cómo puedes hacer eso?’. Entonces sí, creo que la cosa está…hay demasiada sensibilidad en Internet y enseguida se cortan cabezas y no se perdona. Creo que habría que rebajar un poco el nivel de ego y que fuera más, yo creo que para lo que fue concebido, una herramienta para compartir información y que la gente se ayude entre sí. Y que si alguien dice algo que es erróneo y no dispone de la suficiente información, hacérselo ver de forma sana.
A las personas ajenas al rap siempre les ha tirado para atrás el tema del ego, ¿por qué crees que existe este reinado del ego en la cultura?
Pues no lo sé, y yo cuando empecé pues lo hice como todos los raperos, por inercia, a hablar como si me hubiera dado un golpe en la cabeza de pequeño, en plan: ‘hey, tío, qué pasa’, a hacerte más el papel de ‘soy el mejor’. Pero lo ves normal porque estás dentro del movimiento. Ahora que he ido dando pasitos hacia fuera, y viéndolo con perspectiva es como: ‘que ridículo, tío, pero que ridículo’. Todos los temas de ‘soy el mejor, me comes los cojones’… Es absurdo. Yo el único tema que tengo así en mi disco es el de Niño Mimado, pero que me meto más conmigo que con otra cosa y entiendo que suceda, porque el rap nació así y yo mismo lo he hecho, pero ahora mismo me da bastante vergüenza ajena.
No Comments