En la fría noche del viernes 23 de noviembre nos decidimos por ir a ver el rock madrileño de José Miguel Conejo Torres, más conocido como Leiva, ex de Pereza, en la sala La Matriz Creativa de Cartagena. Tras ver la cola llena de grupis, la gran mayoría de público no llegaban a los 19 años, decidimos quedarnos un rato fuera tomándonos algo hasta que empezara el verdadero espectáculo.
A eso de las 11:30 salió Leiva, con ese sombrero que le caracteriza, acompañado de siete músicos. Dio inicio al show con una canción con mucha energía como es Nunca Nadie, uno de los temas más conocidos de su primer disco en solitario Diciembre. Tras ella vinieron Penaltis y Éxtasis, canciones muy similares y que profundizan y culminan en el amor perdido. Pero el verdadero éxtasis de la sala vendría con la canción de Animales, recordando a sus inicios más rockeros de Pereza y que el público supo agradecer coreándolo y saltando sin parar.
La separación de Leiva de su compañero Rubén Pozo no parece afectarle mucho, el comienzo del concierto fueron canciones con potencia y contundentes, apenas dejaban pausa entre ellas. Así, canción tras canción, el concierto se fue convirtiendo en una auténtica fiesta para los que habían decidido pasar la noche del viernes acompañados del madrileño.
Después de cinco canciones, Leiva hizo una pausa y tuvo unas palabras para los asistentes al concierto en las que reconoció que en los tiempos que estamos de crisis valora mucho que la peña se gaste dinero para verle. No dudo en agradecerlo y su «muchas gracias, de verdad” hizo que el público estallara en aplausos. Ellos parecían los realmente agradecidos por poder disfrutarlo.
Tras esta pausa el espectáculo siguió con Superviviente, una canción que confesó haber escrito cuando era un crío y que nunca había incluido en una gira. Ahora, en solitario, parecía el momento adecuado para hacerlo y, sin duda, en esta canción Leiva muestra su lado más cantautor, cargado de sentimiento y personalidad.
Con todo esto llegaron más canciones de su último disco Dicembre. Pudimos escuchar Miedo, canción lenta que en ocasiones se hace un poco pesada pero que fue coreada por la gran mayoría de chicas allí presentes. Lo mismo ocurrió con Aunque sea un rato; canciones muy similares aunque esta última incluía un solo de piano muy melódico. Le siguió “Como lo tienes tu”, una de las canciones más conocidas de Pereza y que, como era de esperar, provocó el desenfreno de toda la sala.
Con todos estos temazos Leiva decidió dar un descanso al público y aprovecho para presentar a toda su banda, lo hizo de forma particular, ya que cada vez que decía el nombre de algunos de sus componentes tocaban canciones de otros grupos como Seven Nation Army de White Stripes, pero el mejor momento fue cuando presento a presentó a Juancho Marques, su hermano y guitarra principal, presentación que acabó con los dos cantando a dúo Ya no tengo problemas. Uno de los mejores momentos del concierto.
También hubo momento para que Leiva rindiera homenaje a uno de sus ídolos, «solo Sabina sabe encadenar esas letras y hacer esas canciones tan bonitas” fueron las palabras que le dedicó a Joaquín Sabina cuando sonó El caso de la rubia platino, una versión con un tono más rock que la canción original.
El concierto siguió con Vis a vis una de las canciones más hermosas de su disco y reconocida personalmente por Rubén Pozo, su compañero de Pereza, como el mejor tema del disco. Estrofas como «Que bonito mirar la sombra que hacen las rejas mientras meto las orejas en el centro de tu andar” volvieron locas a todas las chicas de la sala.
El concierto alcanzaba ya la hora y quedaban pocos temas por tocar, nos deleitó con Telediario, Sudando la Tristeza y 92 para así terminar con todas las canciones de su disco en solitario. Bueno, no todas, aún faltaba Eme, una de las más esperadas. Pero esto no significaba el final, no nos iba a dejar sin los clásicos de Pereza.
Tras una pausa llegaban los vises, empezando por Amelie de su disco Aviones, se echó de menos la voz de Calamaro, parecía que le faltaba algo a la canción. Le siguió, por fin, Eme, canción que hizo enloquecer a las chicas de la sala. Alguna tiró hasta su camiseta al escenario y Leiva se la quedó, seguro que esa chica no durmió esa noche. Para cerrar el concierto eligió “Lady Madrid”, una de las mejores canciones, quizás la mejor, de Pereza. Así llegó el final del primer concierto de Leiva en Cartagena. Sin duda mereció la pena.
Crónica por Francisco Moya Parens.
Fotografía por Pedro José Aguera.
Vídeo por @ElenaBribriblib
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