El pasado sábado 25 de enero Bravo Fisher! actuó en la Sala B de Murcia para presentar su último trabajo titulado “El valle Invisible”, mostrando desde el principio una apuesta arriesgada y renovadora del concepto de “hombre orquesta”.
Bravo Fisher! es puro eclecticismo instrumental, deslizándose entre teclados, sintetizadores, guitarras eléctricas y percusión consigue transmitir unos ritmos emocionantes que acompañados junto su inconfundible voz hacen de la sala una auténtica pista de baile en la que se dan rienda suelta la frescura del pop, los ritmos más electro y la influencia indie que caracteriza a este artista.
Con los ya típicos minutos de cortesía sobre la hora fijada que se dan por supuestos cuando se va a un concierto, Guillermo Galguera más conocido como Bravo Fisher!, saltó al escenario de la Sala B acompañado por dos escuderos con tablas, por un lado, a la percusión digital y a los platillos estaba Javi, y por otro, al teclado y sintetizador estaba Claudio, un habitual en los shows que han hecho junto a Eme DJ.
La canción elegida para abrir la noche fue “Floridablanca”, que sirvió para animar a los allí presentes, que no eran un número elevado, pero habían venido desde fuera de nuestra región incluso para ver al artista vallisoletano. Después fue el turno del primer single del disco, titulado “39”, que transmitía un ritmo más bailable que en el disco gracias los coros del estribillo y al constante dinamismo que Bravo Fisher! muestra sobre el escenario.
También se miró hacia atrás en el concierto, uno de sus primeros éxitos “Go back to Spain” no podía faltar en un ocasión especial como esta, pero no estuvo acompañado de ukelele, lo que le dio otro toque electrónico y tuvo una gran respuesta por parte de las caderas de los asistentes. De su anterior trabajo, “We Were Overnighters” también pudimos escuchar la versión del famoso tema “Video Games” de Lana del Rey, interpretada de una forma más alegre que la versión original de la artista estadounidense.
Uno de los momentos especiales de la noche llegó con la canción “Tras el cristal”, un tema con un compás más tranquilo que el resto, pero que guarda un encanto personal en la letra y un final donde los loops psicodélicos de los sintetizadores se combinan con la delicada voz de Gillermo en perfecta armonía. Con canciones como “Corriendo a ciegas” nos pudimos teletransportar a algún gran festival, como al Arenal Sound en el que Bravo Fisher! actuó tras ganar un concurso, y dejar que los pies hablaran por nosotros mismos.
El final del concierto se aproximaba, y tras unos pequeños problemas técnicos con el cable del micrófono que fueron solucionados con gran rapidez por el pipa de la sala, era el momento idóneo del tema “Sanseacabó”, que fue seguido por “Ysis”. Para finalizar, aclamada por el público con efusividad, fue interpretada la canción elegida para hacer el videoclip más famoso de Bravo Fisher!, “Miradas”, que puso el punto a la noche del sábado. Pero fue punto y seguido más bien, ya que el incombustible Guillermo Galguera anunció que estaría tras del concierto en formato DJ Set en la Indie Room de Sala B
Bravo Fisher! tiene un directo que atrapa y anima a los asistentes a mover el esqueleto al ritmo de su fusión de melodías amables al oído, que aportan frescura al panorama musical nacional y que merecen ser destacadas, independientemente de que seas, o no, oyente habitual de los estilos con los que cualquier purista etiquetaría a este artista. Además, tiene la capacidad de actuar con el mismo entusiasmo y vitalidad ante decenas de personas que ante un festival entero, lo que también es digno de mención.
Artistas así siempre hacen falta en una escena musical cada vez menos controlada por grandes dinosaurios y en la que no es oro todo lo que reluce, donde Bravo Fisher! ha sabido hacerse su propio hueco.
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