Convertir un escenario en un ring de boxeo, bajo esa premisa aparecieron anoche el alicantino Picolo y Kultama, desde Torrejón. Era el tercer y último asalto de este show que ya había pasado por otras ciudades. Todo muy old school, cada uno defendiendo a su crew, ZNP vs VKR. No hubo sangre, pero la sensación fue similar a un la de un Joe Frazier vs Muhammad Ali. No había mucha gente en la sala, en torno a 50 personas disfrutaron de una velada de rap entre dos de los pioneros en el hiphop español.
Los ke kantaron fueron los encargados de abrir la sala, con Dj Tano a los platos, que se quedaría toda la noche como coach de los púgiles.
Picolo hizo de anfitrión dejando a Kultama dar el primer golpe, un gancho en forma de «En tu ciudad» para comenzar el combate, tema de su último disco, Sentencia. Volvió atrás en el tiempo para lanzar el siguiente golpe, un clásico como «También hay gente buena«. Las tablas del hipano-congoleño se hicieron notar, enganchó al público desde la primera canción, todos seguían las directrices y hacían los coros. Siguiendo por amplio repertorio se iba a otro disco, era el turno de «El profe«, el que enseñó a toda España a rapear.
No solo de competí vive Kultama, un gancho de izquierdas con «Paletos» seguido de «Inmigrante» empezaba a poner a Picolo contra las cuerdas. Se acababa su turno de golpear y dejo para el final lo mejor. Apunto estuvieron de caerse los monitores con «Rompo Bafle» pero si cayeron los «oooohhh» del público al escuchar la voz de La Mala Rodríguez en los altavoces, era el turno de «Nacional e Importación«, último punchline de Kultama.
Picolo había estado haciendo de sparring durante demasiado tiempo. Se enfundó los guantes, cogió el micro y el primer jab fue al mentón. «Recuerdame», esa voz tan característica que pasa de casi melodiosa a gutural, estrofa a estrofa. Quería asegurarse la victoria rapidamente, el segundo uppercut fue «Rastata», enloqueció a los asistentes e hizo que Picolo se viniese arriba, los años no pasan en balde pero se le sigue viendo disfrutar como un niño en el ring.
Entre ganchos se trajo al Dr. Jekyll y a Mr. Hyde para acabar con Kultama. Aderezó la velada la aparición de Amel Lady Soul, «Jin Jan» volvió a relajar el ambiente. Todo una estrategia, con un buen juego de pies Picolo lanzó un gancho mortal con «Raptilians». Subió al escenario a JaviKant para soltar el último golpe, «Inhibidores de frecuencia». La velada se alargaba, Picolo parecía volver a ser un adolescente camino a París y terminó sonando una reflexión personal con aires orientales, «El pequeño dragón».
Ambos acabaron juntos en el ring soltando sus últimos punchlines, no hubo Knock-out. Tampoco hubo tiempo para cuenta atrás, la pelea había acabado, el ganador por decisión unánime fue el público, que tuvo ante sus ojos una velada histórica entre dos pesos pesados del hiphop patrio.
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[…] bolo de Picolo, fue similar al que dio hace unos meses en Murcia junto a Kultama, pero aún así quedó demostrado que las tablas y la experiencia son vitales a la […]