Hace un par de meses nos encontrábamos en la madrileña Sala Berlanga, probando un pequeño bocado de esta enorme tarta de 25 cumpleaños tan dulce y llena de recuerdos. Este fin de semana, terminamos por rebañar el plato en el Día de la Música. Un total de veintinueve grupos que han pasado por Subterfuge conformaban todas las capas de un pastel digno de Masterchef.
Con un sol de justicia azotando sobre nuestras cabezas y un ambiente casi desolador, comenzó la primera jornada del Día de la Música. Los Reactivos, Cola Jet Set y Purrse hicieron cargo de ello. Poco a poco Matadero se fue llenando y con McEnroe ya no cabía ni un alfiler en los lugares con sombra que había en la plaza. Conciertos cortos pero contundentes, preparándonos para lo que venía después.
Llegó el turno de Neuman y claro, el público no pudo evitar acercarse al escenario (incluida una servidora) y alzar los brazos mientras se coreaba eso de “oh nooo”. Los murcianos dejaron paso a una insegura Anni B Sweet, que para las caras de preocupación que ponía lo hizo bastante bien. La mueca le cambió cuando subió Noni de Lori Meyers (codazo, codazo, guiño, guiño) a acompañarla con el bajo en las últimas canciones. Ay, ¡qué bonito es el amor!
Marlango y su polifacética líder Leonor Watling era uno de los conciertos más esperados del viernes. El público se entregó al máximo y entre gritos y aplausos se pudo escuchar un “pero qué estupenda está la Watling” y razón no le faltaba, la verdad. Para mí fue la primera sorpresa de este festival. Después fue el turno de unos potentes Ellos, que convirtieron Matadero en una macro discoteca. Te podías saber o no las canciones, daba igual, la juerga estaba asegurada.
Sexy Sadie, un grupo desconocido para mí, pero que por lo que parece aún tiene bastantes fans que salieron de debajo de las piedras para no perderse la oportunidad de ver a su grupo favorito. Poco puedo decir de la sesión Dj de Alaska y Nacho Canut, o lo que es lo mismo, la sesión Dj más corta de la historia. El cartel aseguraba media hora al menos, lo que se vio reducida a apenas 10 minutos. Parece ser que Alaska ya no está para esos trotes, dado que en el ratillo que estuvo “pinchando” se dedicó a tocarse el pelo y hacer fotos con su IPhone. Un ‘postureo que te veo’ en toda regla.
Pero no pasa nada porque todo lo que cae acaba levantándose. Dover cogió el relevo y llegaron primeros a la meta .Y os preguntaréis ¿Tocaron las canciones de sus últimos discos o los temazos que les llevaron a ser uno de los mejores grupos heavy-rock de España allá en su época dorada? Gracias al cielo, lo segundo. Fue la pera limonera poder escuchar “Serenade” o “Devil came to me” otra vez, en directo, y ver como TODO el público, toda una generación, se las sabía y se volvían locos. Sin duda las hermanas Llanos -más delgadas que nunca- acertaron de lleno y pusieron la guinda a la noche del viernes. La noche continuó con los genialísimos Corizonas, los cuales me quedé con ganas de más, unos Cycle que desinflaron un poco los ánimos y un Carlos Jean, que menos mal, cerró el primer día como se merece.
Mucho mérito tienen los chicos de La La Love You, que arrancaron el segundo día de festival con una energía desbordante. Una pena que sólo les dejaran 15 minutos para tocar. Les siguieron sus primos hermanos, los molones Pantones que presentaron su último disco: “¿Quién quiere primavera?”. Del ruido rosa a un ruido suave con tonos folk. Geniales The Bright que poco a poco se abren camino en este angosto camino. Sin duda merece la pena verles en directo. Bravo Fisher dieron una vuelta de tuerca con un sonido más electrónico, que se relajó al final con el acompañamiento de Vega que subió para tocar un par de temas.
Y aquí llega la segunda sorpresa del festival, el dueto Najwajean. Najwa Nimri y Carlos Jean unidos mano a mano crearon en un momento una rave a pleno sol. Pero ahí no acabó la cosa, Dr Explosion (sí, sí, los de Drácula Ye-Yé) en dos palabras: lo petaron. Pudimos recordar ese sonido garajero que tan poco se ve y Jorge, su líder, saltó al público con la guitarra dejándonos a todos con la boca abierta. Las sorpresas continuaron de la mano de L KAN. De no conocer nada de este grupo a ser recordados de por vida, y no es para menos después de ver sus atuendos y oír sus letras. Indescriptibles.
Y llegó uno de los momentos más esperados, cientos de fans brotaron del asfalto madrileño para ver a… ¡¡¡Los Fresones Rebeldes!!! Fue bonito volver a ver a este grupo mítico de los 90 -algo más mayores que entonces y más pasados de ros…- al igual que Pauline en la Playa, compuesto por las hermanas Álvarez, tan felices de recordar aquellos tiempos.
Arizona Baby triunfaron como siempre. Con dos guitarras y una batería y por supuesto, una inconfundible voz, hacen vibrar a todo aquel que se encuentre delante. Para que luego digan que en España no tenemos buenos músicos. Señoras, señores ¡no dejen de escucharles!
¡Y más fans para Australian Blonde! Otro mítico grupo de la independiente Subterfuge, que se conserva en perfecto estado después de tantos años. Con la media noche llegaba la sexy y deslumbrante Vinila Von Bismark que no paraba de seducir y posar, olvidándose un poco de eso de cantar. Algo más de caña dieron los Killer Barbies que junto Mercromina y Najwa, cerraron el Día de la Música.
¡Felicidades Subterfuge, a seguir así de bien!
Podrás ver todas las fotos en nuestro álbum de Facebook dedicado al festival.
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